Cambiando las escrituras de constitución sin avisar

Todos sabemos que existen leyes que en principio deberían permitir la creación de sociedades limitadas en un plazo de 24 horas y por 100 euros cumpliendo determinadas condiciones.

Por si hubiera alguna duda, en realidad no todo es tan bonito y normalmente el proceso de la notaría (¡oh, sorpresa!) es el que juega malas pasadas, así que es conveniente preguntar (al PAIT, al CIRCE, al Centro Municipal de Empresas) si existen malas experiencias con algún notario en particular para evitarlo.

En mi caso particular la mala experiencia viene de tratar con el notario Don Fernando Arturo Martínez Ceyanes con despacho en la calle Tomás Zarracina 1, 1º A, 33206 de Gijón:

Yo solicité la constitución de una sociedad limitada a través del CIRCE (número 003432786B, PAIT 10240) para ajustarme al proceso de creación simplificada que todos conocemos (RealDecreto-Ley 13/2010). Mi sorpresa fue grande al recibir la factura del notario (267,75 euros), así que decidí reclamar porque no entendía cómo podía ser.

En una primera conversación en la notaría al recibir la factura me dijeron que las escrituras les habían llegado de tal manera que las facturas se correspondían con su estructura, así que me propuse investigar lo sucedido:

1.- Reclamé al PAIT, donde me confirmaron que el proceso por su parte era correcto, así que el problema debía estar en la notaría.

2.- Reclamé al Colegio Notarial de Asturias, donde mi queja fue desestimada (registro de salida número 434).

3.- Reclamé al Ministerio de Justicia (Dirección General de losRegistros y el Notariado) e igualmente mi queja fue desestimada (identificador de Solicitud: 2553167, Número de Entrada al Registro: 201181008762).

Como era sencillo de pronosticar, las acciones de los puntos 2º y 3º fueron completamente inútiles salvo para generar negocio para los de Correos.

Así que dejo constancia pública del hecho de que las escrituras de constitución de la sociedad limitada llegaron correctamente al despacho del notario Don Fernando Arturo Martínez Ceyanes, donde se cambiaron por otras sin avisar al futuro empresario.

Soy consciente de que firmé las escrituras que me presentaron en la notaría sin pensar en que las hubieran podido modificar, aunque de cualquier manera para un profano en leyes como yo hubiera sido complicado encontrar las diferencias.


Así que mi consejo es que se haga una buena elección de notario porque el proceso de reclamación es simplemente una pérdida de tiempo, esfuerzo y dinero. Mucha suerte.